En Olivarera Nuestra Señora del Rosario somos conscientes de los impactos que tienen las actividades agrícolas sobre la naturaleza. Por esta razón desempeñamos nuestro trabajo de la forma más eficiente y respetuosa con nuestro entorno, garantizando la sostenibilidad del medio y la actividad.
Luchamos por la mejora continua de nuestros procesos de producción, apostando por el I+D+I, invirtiendo en la última tecnología y pensando en la eficiencia energética. Nuestro RSC (responsabilidad social corporativa) está sustentada bajo el objetivo de generar el menor impacto posible sobre nuestro entorno, a la par que aseguramos unos niveles de calidad incomparables.
Nuestra producción se sitúa sobre la base del compromiso, la responsabilidad y sostenibilidad. Velamos por garantizar un futuro a las próximas generaciones, pudiendo disfrutar de un medio igual de rico que el actual.
Cualquier acción que hacemos sobre el medio que nos rodea deja huella, y esta huella tendrá un resultado negativo o positivo dependiendo de la tecnología que utilicemos sobre ella. Por esta razón nos comprometemos con la reducción de emisiones de carbono y la optimización en el consumo de recursos naturales.
Hacemos uso divulgativo del AOVE como un producto de consumo imprescindible, fundamental en cualquier dieta equilibrada y saludable. Para ello trabajamos con el objetivo de obtener un zumo de la mejor calidad, respaldado por la Denominación de Origen Baena y los procesos de certificación y controles de calidad que lo acreditan.
El leitmotiv de nuestra empresa es la transparencia y la reivindicación del aceite de oliva virgen extra. Nos tomamos nuestro compromiso con el sector predicando con el ejemplo, haciendo labor de pedagogía con el consumidor, para que puedan distinguir entre el refinado y un zumo de aceituna como el nuestro.
Este compromiso se basa en ensalzar la imagen del AOVE y de los miles de productores que trabajan para obtener un producto de calidad.